martes, 4 de enero de 2011

Telaraña

Estamos parados en el medio de una telaraña tejida con hilos de falsas esperanzas, toda su trama son sueños, suposiciones y deseos de un futuro utópico, que nos atrevemos a fantasear para no tener que aceptar nuestra dolorosa realidad.
Cada paso q damos nos tambaleamos más, y esa inestabilidad nos hace tomarnos más fuerte de las manos, pero a la vez  nos hace hundir más en el abismo de la desesperación, porque sabemos que de un momento a otro vamos a caer.  Nos negamos a ver que con el paso del tiempo estamos sostenidos cada vez por menos hilos, y que el peso de la verdad ya está produciendo sus efectos erosivos en los pocos entramados que nos mantienen a salvo.
Seguimos  aferrándonos a algo que inevitablemente tiene que pasar,  y la agonía de saber que nos vamos a caer es más desgastante que la caída misma,  estar palpitando el momento en que sucederá nos hace ver fantasmas  y tener miedos que al intentar espantarlos nos lastiman más.
No podemos cambiar las cosas, pero tampoco nos resignamos a tomarlas como son, el amor se nos está convirtiendo en un puñal que atraviesa el corazón de forma dolorosa, porque sabemos que lo estamos sustentando en una base de irrealidades.
Queremos ser lo que no fuimos, ni jamás seremos, ir más allá de nuestras posibilidades, llevarnos el mundo por delante en nombre de lo que sentimos el uno por el otro, pero el mundo se nos viene encima y nos aplasta.
No me sueltes la mano, no me dejes caer… siento que mis pies están pisando cada vez más el vacío…
Sindel Avefenix




No hay comentarios:

Publicar un comentario